Alberto Fernández, ex jefe de Gabinete de los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner, destacó que la marcha del miércoles es “un llamado de reflexión” a la oposición que “tiene que hacer el esfuerzo de unirse para generar una alternativa que le pueda ganar a Macri” en el 2019.

El jefe de campaña de Florencio Randazzo en las últimas elecciones, dijo en diálogo con que “no es una unidad para borrar el pasado”, sino que están proponiendo “hacer política”, es decir, impulsar “un mecanismo para confrontar posiciones y encontrar síntesis”.

“Sobre el pasado lo que tenemos que entender es que el problema que tenemos hoy no es Cristina, es Macri; el problema que tenemos hoy es Dujovne, no es Moreno”, agregó y sostuvo que “tenemos que poner la mirada en el futuro”.

Fernández exigió “Macri deje de usar al Poder Judicial con fines políticos” y señaló que “la justicia ha dicho cosas increíbles para ser consecuentes con Macri”, que son un “enorme peligro porque están sentando jurisprudencias atroces que el día de mañana se le pueden aplicar a cualquiera”.

-¿Cuál es la importancia de la marcha multitudinaria del miércoles?

-Tengo la sensación de que la marcha canalizó de algún modo el enojo de gran parte de la sociedad argentina. Hay gente que percibe que Macri no encuentra el rumbo de la política económica y que lastima a muchos la calidad institucional con su permanente intromisión a la justicia. Macri tiene una lógica de construcción de la Argentina donde primero espera que ganen mucho dinero los poderosos para que luego parte de ese dinero derrame en los sectores más desposeídos, y esto posterga mucho a los sectores más pobres. Es un llamado de atención para el gobierno, y es un llamado a la reflexión también para la oposición que definitivamente tiene que hacer el esfuerzo de unirse para generar una alternativa que le pueda ganar a Macri. El secreto no es solo unirse, es unirse y generar una alternativa en el escenario electoral que nos permita ganar en el 2019.

-¿Cuál es el camino o la forma para lograr esa unidad?

-La unidad demanda un gran debate. Un gran debate quiere decir que nos podamos sentar todos alrededor de una mesa y discutir el problema que tenemos en el presente y tratar de buscar soluciones. Sabemos que no tenemos la misma visión sobre lo que pasó, pero siento que tenemos una visión muy parecida sobre lo que nos está pasando. Entonces nosotros tenemos que discutir en torno a lo que nos está pasando y ver cómo ofrecer salidas. No es una unidad para borrar el pasado, no es un indulto lo que estamos proponiendo; estamos proponiendo hacer política, y la política es un mecanismo para confrontar posiciones y encontrar síntesis; esa es la unidad que necesitamos. Y animarnos a discutir, hace muchos años que el peronismo no discute, es bueno que ahora lo haga.

-¿Le parece que además del peronismo hay que sumar otras fuerzas a esa unidad?

-Es necesario que se sumen todos. Está claro que el peronismo es columna vertebral de cualquier espacio opositor. Pero dividido como está, no es columna vertebral de nada. Que el peronismo se unifique va a ser un gran incentivo para que todos los demás quieran participar de ese espacio opositor. Pero el peronismo solo no alcanza, hay que sumar a todos. Y hay que sumarlos con esta racionalidad, de debatir, de confrontar posiciones, de encontrar síntesis; y si eventualmente creemos que hay más de un candidato posible, ir a unas PASO y que la gente resuelva.

-¿De qué manera se resuelven las diferencias con el sector de Cristina Kirchner, usted como representante del sector de Randazzo, por ejemplo?

-Creo que nosotros tenemos discusiones sobre el pasado, pero no tenemos tantas discusiones sobre el presente, y sobre lo que hay que hacer en el futuro. Sobre el pasado lo que tenemos que entender es que el problema que tenemos hoy no es Cristina, es Macri; el problema que tenemos hoy es Dujovne, no es Moreno. Entonces si uno tiene en cuenta estas cosas es mucho más fácil poder hablar. Si nos quedamos encerrados discutiendo a Moreno, a Cristina, va a ser más difícil el punto de encuentro; además estamos discutiendo el pasado y no el futuro que es lo que tenemos que discutir. Insisto, tenemos que crear una alternativa a Macri, no tenemos que ganarle a Cristina, tenemos que ganarle a Macri. Entonces tenemos que construir esa alternativa y no la vamos a construir poniendo el dedo en la llaga del pasado, tenemos que poner la mirada en el futuro. Es eso lo que tenemos que hacer.

-¿Le parece que el gobierno toma nota de este reclamo y de la posibilidad de que haya una unidad del peronismo de acá al 2019?

-El gobierno teme mucho que el peronismo se reunifique, por eso llama la atención que se escuchen audios de dirigentes peronistas (en las escuchas a la ex presidenta). Yo creo que Cristina debe hablar mucho peor de los funcionarios del gobierno, sin embargo no hay ninguna voz de Cristina hablando de Macri o de cualquiera de sus ministros. Para el gobierno la unificación del peronismo es un gran problema porque la táctica electoral del gobierno fue unir al anti peronismo y demonizar a todo lo que tiene que ver con el peronismo. Empezaron con Cristina, siguieron con el peronismo y ahora están en la etapa de la demonización del sindicalismo. Y nosotros tenemos que darnos cuenta que es solo una táctica porque Macri quiere demonizar al sindicalismo y tiene de ministro de Trabajo al hijo de un sindicalista que se enriqueció en el sindicato, se hizo millonario, que tenía caballos de carrera y que hizo toda esa plata con el dinero que robó como gremialista de los plásticos. Y ese Macri y ese ministro quieren cambiar al sindicalismo. Por favor. A mí Macri no me confundió nunca y ahora me confunde menos. Lo que quiero es llamar la atención de todos para que salgamos de la lógica de discutir como a Macri le conviene que discutamos y empecemos a discutir cómo queremos discutir nosotros.

-¿Cree que la persecución judicial y política va a recrudecer teniendo en cuenta una posible unificación del peronismo?

-Me parece que también Macri ha descubierto que eso es algo que le rinde, porque además los grandes medios de la capital usan mucho el tema de la persecución judicial y de alentar la idea de la corrupción y de los funcionarios delincuentes. Yo no tengo ningún interés en que quien haya corrompido en la función quede impune, que la justicia investigue y cuando más rápido mejor resuelva este hecho. Lo que sí quiero y exijo, es que Macri deje de usar a la justicia como lo está haciendo, eso lo exijo, porque está haciendo un desgaste enorme sobre la justicia. La justicia ha dicho cosas increíbles para ser consecuentes con Macri, que los ciudadanos comunes no se dan cuenta pero son un enorme peligro porque están sentando jurisprudencias atroces que el día de mañana se le pueden aplicar a cualquiera. Quisiera que todos advirtamos que Macri usa la justicia con fines políticos y que le pedimos a la justicia un poco de independencia y que no corra detrás de los vientos políticos sino que corra detrás de la justicia.