El obispo de Bariloche, Juan José Chaparro, fue uno de los integrantes de la comitiva, que por decisión del juez Federal Gustavo Villanueva, ingresó el domingo a la zona de conflicto y pudo conversar y verificar el estado de salud de quienes allí estaban.

El lunes participó del velatorio de Rafael Nahuel que se realizó en la humilde vivienda de los padres del joven muerto. “Acompañé a la familia porque se trata de personas de la comunidad a quienes conozco”

-¿Cómo observa la situación de los acontecimientos que se están viviendo en la comunidad?

-Por supuesto con mucha preocupación y dolor por todo lo ocurrido, con una muerte en estas situaciones, y con la esperanza de que se abran caminos racionales a través del diálogo y la ley para que estas cosas no se repitan, y no comencemos a sumar víctimas, muertos. Hay que dialogar y hacer todo lo posible por salvar vidas humanas, que es lo supremo que tenemos.

-¿Qué sintió el domingo al comunicarse con los hombres y mujeres que aún estaban en la zona de Mascardi?

-En principio valoro mucho la decisión de juez Villanueva por habernos permitido ingresar con médicos y psicólogos y llevar de alguna manera ayuda humanitaria a ese lugar donde había mujeres y niños. A mí me llamaron los mapuches y agrupaciones de derechos humanos para que salga de garante de esta actuación y los acompañé en la atención de los heridos. Para el juez la normalidad es que las personas bajen y se pueda comenzar a dialogar. Ellos dicen que están dispuestos a dialogar pero necesitan un tiempo de duelo porque acaba de morir un muchacho.

-¿Pudo conocer lo que realmente ocurrió el sábado?

-Existen distintas versiones sobre lo ocurrido, como ustedes saben. La gente de ahí sostiene que no tienen armas, que simplemente huyeron. En lo personal yo no vi armas, estuve muy cerquita de ellos y no se divisaba ningún arma, pero yo no puedo asegurar lo que paso el sábado, ellos dicen que no tenían armas, las fuerzas de seguridad dicen que sí. Sólo ellos lo saben. Lo determinará la justicia.

¿Usted cree que este grupo es o forma parte de la RAM (Resistencia Ancestral Mapuche)?

-No digo que no exista el RAM, yo digo que si existe, no le veo tanta entidad como afirman, y lo que le puedo decir es que la gran mayoría del pueblo mapuche no se identifica con actos que dicen del RAM, todo lo contrario. No siempre que ocupen un lugar significa que son RAM", hay diversidad de grupos que actúan de distintas maneras.

-¿Hubo una manifestación el domingo en la Catedral en plena misa?

-Sí, la hubo, pero no se provocaron daños en la catedral de Bariloche. Lo desmiento. Fue luego de una movilización por otro motivo. Sólo se interrumpió la misa. Nada más.

-¿Qué opinión tiene del uso de las fuerzas federales para cumplir las órdenes judiciales de desalojo?

-Por supuesto que no estoy de acuerdo con la violencia para que se cumpla con una orden de desalojo. Hay una ley que se prorrogó que no permite el desalojo de las comunidades aborígenes. Hay quienes se avienen y hay otros grupos que no se avienen.

El obispado de la diócesis barilochense ya había expresado su pesar por la muerte de Rafael Nahuel afirmando en un comunicado que "la primera víctima de la violencia es la paz y la concordia entre las personas y, en este caso concreto, el sagrado derecho a la vida y la integridad de las personas".

También se expresó que su convicción que el camino es "el diálogo, como constructor de puentes".

La representación eclesiástica también afirmó que “desoír o ignorar durante décadas reclamos, puede esconder sutilmente, algún tipo de violencia institucional”.  Y agregó que la muerte de Rafael Nahuel fue "fruto del accionar de las fuerzas federales, en un operativo ordenado y supervisado por el Juzgado Federal de Bariloche".

Para concluir, el obispado hizo un "llamado a las autoridades, para que instauren canales de diálogo para resolver las cuestiones relativas a los reclamos de los pueblos originarios". Apuntó que ese diálogo en el marco de la ley "implica necesariamente, la implementación integral de la ley 26.160", que es la ley que ordena el relevamiento de comunidades indígenas e impide los desalojos.