“Disgustar a los argentinos parece la tarea a la que está dedicado hace más de un año Mauricio Macri; no conozco ninguna medida del presente gobierno con la que los argentinos puedan acordar”, manifestó Alicia Castro en esta entrevista con , donde argumentó que están “transmitiendo los peores valores de la especie humana”, como la “evasión, la traición y la mentira”.

Para la ex embajadora ante el Reino Unido, “el gobierno argentino está dispuesto a desmantelar todas las medidas legislativas, jurídicas y administrativas que hasta ahora estaban destinadas a proteger los recursos naturales” de las Islas Malvinas. Y remarcó “que los recursos no son de libre disposición de la Cancillería si no que pertenecen a los 40 millones de argentinos”.

Castro, también ex embajadora en Venezuela, destacó que el rechazo al ALCA en la cumbre de las  Américas de Mar del Plata “es la derrota estratégica más importante que ha sufrido Estados Unidos después de Vietnam” y agregó que actualmente “Macri y Temer son agentes de la desintegración regional, así como los presidentes que los antecedieron fueron los arquitectos de la unidad”.

- ¿Qué análisis hace de la situación actual del gobierno nacional con respecto a la defensa de la soberanía de las Islas Malvinas y el tema de las explotación de petróleo?

- El gobierno nacional no está reivindicando la soberanía de Malvinas en ningún foro, el presidente Macri se encontró con el primer ministro Cameron y no hablaron de Malvinas; luego se cruzó en un pasillo con la nueva primer ministra Theresa May y le mintió al mundo diciendo que le había asegurado que iba a discutir el tema Malvinas y lo desmintió la propia canciller Malcorra. Ha tenido reuniones en Londres con parlamentarios oficialistas y miembros de la Cancillería, y en ningún momento se ha reivindicado la soberanía argentina en Malvinas, ni se ha protestado contra la exploración clandestina de petróleo, ni contra la explotación depredadora de la pesca, y no se ha hecho ninguna queja contra la creciente militarización. Recientemente hemos denunciado con el diputado nacional Guillermo Carmona (del Frente para la Victoria por Mendoza) la existencia de vuelos militares británicos con destino a Malvinas que hacen escala en Brasil y la Cancillería salió a protestar sólo después de que nosotros hiciéramos la denuncia, pero nunca ante el Reino Unido. Y lo peor de toda la cuestión es que el 13 de septiembre de 2016 firmaron un acuerdo la Cancillería argentina y la del Reino Unido, donde se comprometen a remover todos los obstáculos al crecimiento económico y al desarrollo sustentable de las islas en los que refiere a hidrocarburos, pesca, comercio y navegación. Quiere decir que el gobierno argentino está dispuesto a desmantelar todas las medidas legislativas, jurídicas y administrativas que hasta ahora estaban destinadas a proteger los recursos naturales, y cabe recordarle al gobierno que los recursos no son de libre disposición de la Cancillería si no que pertenecen a los 40 millones de argentinos.       

Los británicos públicamente sustentan la posibilidad de un conflicto bélico con Argentina mientras  la Argentina cede en todos los planos a la pretensión británica sin lograr nada a cambio     

- ¿Por qué cree que al gobierno no le interesa la soberanía?

- Ya Macri en el año 1997, en un reportaje que le hizo Página 12, expresaba que no entendía de soberanía, no entendía por qué reivindicábamos la soberanía en Malvinas siendo que tenemos un territorio tan grande, y él tenía entendido que representaban un déficit para el Reino Unido. Eso lo decía como presidente de un club de fútbol, no tenía demasiada incidencia, pero como jefe de Estado es insostenible. Es evidente que él sigue sin entender qué significa la soberanía y el valor de reivindicar nuestra soberanía en Malvinas. Desde el siglo XVIII la corona británica aspiraba a tener ese enclave colonial al sur de nuestro continente en la confluencia de los dos océanos. “Esto nos hará dueños de los mares”, dijo Lord Anson cuando hizo un viaje en nombre de la corona. Y ése fue el motivo de la usurpación en 1833. Tenemos ahora instalada una base militar gigantesca, Malvinas es uno de los puntos más militarizados del mundo, hay menos de tres mil habitantes y casi dos mil soldados británicos pertrechados con aviones de guerra, buques de combate, misiles, tanques, helicópteros, radares, equipos de espionaje y de control, y hasta un submarino nuclear con la capacidad de llevar misiles Tomahawk y de atacar eventualmente un barco a 50 millas. Y ésta base militar es incrementada año a año en base a una hipótesis de conflicto con Argentina. Yo estuve en la sesión de la Cámara de Diputados en el 2015 cuando el ministro de Defensa británico promovió entre los parlamentarios y lo logró, el aumento del presupuesto militar para Malvinas y le aumentó 180 millones de libras para los siguientes 10 años argumentando firmemente sobre la posibilidad de un conflicto con Argentina. Mientras los británicos públicamente sustentan la posibilidad de un conflicto bélico con Argentina, la Argentina cede en todos los planos a la pretensión británica sin lograr nada a cambio.            

- ¿Qué beneficios obtiene el gobierno de Macri con ésta posición, además de provocar a la mayoría de los argentinos?

- Beneficios ninguno. Y disgustar a los argentinos no parece importarle en ningún plano. No parece ser la mayor preocupación de quién se auto condona una deuda millonaria del correo, de quién ha iniciado una guerra contra los maestros que piden un salario digno, de quién carece de la mínima sensibilidad social para tratar el tema del empleo, de quién ha abierto la economía tan brutalmente que se están cerrando y liquidando sectores enteros de la industria argentina. Disgustar a los argentinos parece la tarea a la que está dedicado hace más de un año Mauricio Macri. No conozco ninguna medida del presente gobierno con la que los argentinos puedan acordar.

- Sobre al conflicto docente, ¿Cómo vio la oferta que hizo la gobernadora María Eugenia Vidal a los maestros que no hacían huelga? ¿Es algo inédito para un gobierno?

- No conozco ningún gobierno que realice esas operaciones que por otro lado están condenadas por la Organización Mundial del Trabajo. Conozco empresas que lo han hecho, por ejemplo, cuando Aerolíneas Argentinas se privatizó, yo era secretaria general del gremio de aeronavegantes y  cuando tomábamos alguna medida de fuerza en defensa de la empresa, los directivos privatizadores intentaban tomar tripulantes de cabina de la calle, “casualizar” el empleo, “macdonalizar” el empleo, que es lo que está tratando de hacer Vidal con los maestros. Intenta “macdonalizar” el trabajo del maestro, que por supuesto es una profesión muy elevada y a la que todos debiéramos aspirar a elevar. Efectivamente sólo la educación podrá mejorar a la Argentina en todo nivel. De un gobierno no recuerdo semejante acción, y ahí tenemos otro problema, el de la escala de valores que está imponiendo Macri a los argentinos. Se premia a los evasores, empezando por él mismo con Panama Papers, y esto viene de lejos porque la empresa de su familia, Socma, logró que la dictadura militar estatizara la deuda de la empresa. Es decir, que cargara a toda la sociedad argentina con la deuda de Macri. Y quieren seguir con el mismo tren, que la deuda privada de los Macri caiga sobre las espaldas de todos los argentinos. Además, eliminar los impuestos a los grandes exportadores, permitirle que no declaren sus exportaciones; están premiando la evasión cuando cualquier gobierno necesita recaudar. Vidal está premiando a quienes traicionen a sus propios compañeros, lo que en la jerga habitual se llama “carneros”. El carnero es una figura que nadie quiere entre sus amigos porque es básicamente un traidor de clase, a su profesión y no conviene que un maestro tenga esos valores. No le conviene a la sociedad. Se está premiando a la mentira, uno ve la cosa burda que armó Bonelli con Clarín y con Macri con respecto a que Felipe González había dicho que para que llegaran inversiones a España estaban esperando que metan presa a Cristina Kirchner. No creo que Bonelli se maneje solo en éste sentido, alguien se lo debe haber indicado. Y esa mentira, esa ficción, esa fabricación, se coloca en la tapa de los diarios. Evasión, traición, mentiras; esos son los valores que está inculcando el gobierno de Macri. Desde el poder se transmiten valores y éste gobierno está transmitiendo los peores valores de la especie humana, una gran decadencia aparte de la banalidad, que es otro rasgo distintivo de éste gobierno, junto a la mentira y el cinismo.

El gobierno de Vidal intenta “macdonalizar” el trabajo del maestro

- ¿Cómo analiza la situación de América Latina, el avance de las derechas sobre Venezuela, Ecuador, y Bolivia?

- Algunos, como observadores, dicen que son olas; pero como políticos y ciudadanos nosotros tenemos que cuidar que las olas no se lleven a la playa. Y cada uno de nosotros es un granito de arena en esa contención de nuestros logros, de nuestros derechos. Es muy triste porque en los últimos 12 años se logró, con una conjunción extraordinaria de líderes de izquierda, progresistas; la forja de un bloque continental que tenía no sólo propósitos comerciales sino de unidad política. La Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños, la Celac, fue un extraordinario logro. Reunir a 33 países con Cuba y sin la presencia de Estados Unidos y Canadá, fue un largo sueño hasta de Bolívar y San Martín. Es un bloque de 33 países, con 600 millones de habitantes, 20 millones de kilómetros cuadrados, somos el primer productor de alimentos del mundo, el tercer productor de energía, tenemos la mayor biodiversidad del planeta, y además con hombres y mujeres capacitados, entrenados, educados. Un bloque inmensamente rico y poderoso, con un tercio del agua dulce, niveles desarrollados de industria. Podemos tener soberanía política e independencia económica y podríamos autoabastecernos si quisiéramos, porque falta incrementar el comercio intrarregional que no está suficientemente desarrollado. Somos inmensamente ricos y poderosos con la condición de estar unidos, por eso no lo quieren los otros bloques como los Estados Unidos, que pretenden tener un área de libre comercio de las américas donde la Argentina y los demás países ocupen el triste rol de productores de materia prima, y ellos elaborarlos y luego venderlos, con lo cual perderíamos capacidad industrial y empleo. Eso es lo que logramos derrotar hace diez años cuando se rechazó el ALCA. En la anterior cumbre americana en Quebec, el único que estuvo en contra del ALCA fue Hugo Chávez pero luego logró que todos rechazáramos el ALCA, que es la derrota estratégica más importante que ha sufrido Estados Unidos después de Vietnam. Nos paramos como un bloque capaz de tomar decisiones estratégicas, políticas y económicas en beneficio de nuestros pueblos. Y esto es lo que se está desarticulando hoy en día. Macri y Temer son agentes de la desintegración regional, así como los presidentes que los antecedieron fueron los arquitectos de la unidad regional. Y son muy explícitos y muy brutales. Argentina, Brasil, y Paraguay, con Uruguay como acompañante, echaron a Venezuela del Mercosur, y con unos modos que no se han visto nunca en la diplomacia mundial. No existe ningún antecedente de un país que haya echado a una canciller por la fuerza pública, de la Cancillería, como lo hicieron con los cancilleres de Venezuela y de Bolivia. ¿Por qué lo hicieron? Inmediatamente Malcorra dijo: ahora, rápido, vamos a hacer acuerdos de libre comercio con la Unión Europea. Aspiran a eso, a unirse a la Alianza del Pacífico, México, Perú, Colombia, Chile y negociar acuerdos de libre comercio con Estados Unidos. Además de ser inconveniente políticamente es una estupidez económica, porque hace muchos años que el Mercosur estaba tratando los acuerdos con la Unión Europea; no lo firmaron porque los países europeos son proteccionistas de su industria agropecuaria, mientras protegían su industria querían apertura de nuestros productos; van en contra de los intereses de nuestros países.

Pereyra fue el primero de éste ciclo que firmó un convenio flexibilizado, por lo que el “virrey” Macri lo premió llevándolo a visitar al rey de España con un traje de etiqueta

- Que es lo que está haciendo Macri ahora, ser el “supermercado del mundo” y exportar productos primarios agropecuarios.

- En una reciente reunión internacional de intelectuales y movimientos sociales en defensa de la humanidad que se realizó en Venezuela, de la que participé, Nicolás Maduro, que no tiene pelos en la lengua, llamó a Macri “esperpento de la historia”. Y le dijo “el pueblo argentino no te quiere, te detesta y se encargará de ti más temprano que tarde”. Muchos en América Latina compartimos ese sentimiento, verdaderamente es un esperpento de la historia. Macri es un presidente de extrema derecha que está llevando a cabo en la Argentina el mismo plan económico de la dictadura militar. No lo digo yo, lo dijo Lavagna, por ejemplo. Y éste no es el plan económico de los noventa, es el de la dictadura, aquello que llamaba Martínez de Hoz “achicar el Estado para agrandar la Nación”. Lo que sí hace es repetir las mentiras de los noventa que ya se ha demostrado que son absolutas falsedades: que la flexibilización laboral creará empleo, que la rebaja de impuestos creará industria; y está llevando a la Argentina a un modelo extractivo de materias  primas y está permitiendo, por ejemplo a los británicos, la reconquista de los territorios y la extracción de nuestros recursos naturales. Cuando el 9 de julio escuché a Macri decir “querido rey” y expresar la angustia de los patriotas cuando firmaron el acta de la independencia, escribí un artículo preguntándome, preguntándole, si esto era un lapsus, un desliz de su propia conciencia de cómo se sentiría él frente a un monarca o si tenía decidida una política colonial, de sujeción a los poderosos. Y la respuesta la tenemos, es un gobierno que se arrodilla frente a los poderosos. Todos hemos visto esas imágenes casi obscenas de Macri riéndose a carcajadas con el rey de España; y no es que no pueda acercarse a un rey, el problema es cómo. Con un par de sindicalistas disfrazados, con Gerónimo Venegas que no tiene ningún problema en vender a los peones rurales como esclavos.

- Y Guillermo Pereyra del sindicato de gas y petróleo.

- Claro, Pereyra que fue el primero de éste ciclo que firmó un convenio flexibilizado y por lo tanto, el “virrey” Macri lo premió llevándolo a visitar al rey con un traje de etiqueta. Ahora, se han confundido porque han creído que a todos los sindicalistas les iban a poder poner un traje. Y éste es el pueblo argentino que tiene una gran tradición de movimiento obrero organizado, y aunque tenga eventualmente traidores o flojos de cabeza de la CGT, eso no va a servir para contener la protesta social. Y esto se está expresando a través de otros dirigentes fuera de los triunviros, a través de la Corriente Federal, de la CTA, a través de dirigentes como Víctor Santa María, de Yasky, de Palazzo. No le van a poder poner el traje. Creo que la movilización y la protesta van a crecer, se les acabó la luna de miel y la mayoría de los argentinos están expresando que hasta aquí les llegó la paciencia.