Nilda Garré, diputada nacional por el Frente para la Victoria-PJ se refirió a la presentación del jefe de Gabinete, Marcos Peña, en el Congreso y sostuvo que “contesta cosas muy generales, a veces por la concepción muy diversa de las respuestas son hasta incoherentes y contesta muchas veces mentiras flagrantes”.

“El miércoles dijo que no iba a haber despidos en Ferrobaires en el mismo momento en que estaban mandando más de 400 telegramas de despidos; fue casi una burla al Parlamento porque se le había hecho esa pregunta concreta y la respuesta que recibimos el martes a la noche decía que no, y el miércoles empezaron a mandar los telegramas”, explicó la ex ministra de Defensa y destacó que “uno a veces no sabe bien para qué viene” si lo que hace es “decir inexactitudes y vaguedades”, que les “hace perder el tiempo a todos”.

Garré indicó en diálogo con , que “lo que queremos son respuestas concretas sobre problemas muy graves, algunos gravísimos que están vinculados al tema del endeudamiento o vinculadas a las gravísimas responsabilidades del ministro de Finanzas”, Luis Caputo.

Y apuntó contra Peña porque “no solo contesta inexactitudes sino que lo defiende, defiende a un funcionario que omitió declarar ante la AFIP y ante la Oficina Anticorrupción que tenía un offshore con cuantiosos fondos y que era propietario de esa compañía”.

La ex ministra de Defensa y de Seguridad de Nèstor y Cristina Kirchner, sostuvo que Caputo “asumió ocultando eso, con el agravante de que esa sociedad habría negociado por los fondos buitres en el momento en que tuvimos que resolver el conflicto en la etapa del juez Griesa”; es decir que “esta compañía Noctua Partners estaba representando a parte de esos deudores”.

“Sin embargo se lo defendió, parecía que se hablaba de San Martín, cuando es una persona que asusta por la falta de ética, la falta de límites y la confusión que tiene entre los intereses propios y los de la República”, remató Garré.

Las operaciones de Clarín

Esta semana desde el Departamento de Justicia de Estados Unidos desmintieron una nota de Clarín del 2015 en la que le adjudicaban una cuenta millonaria en ese país a Nilda Garré y a Máximo Kirchner.

Desde la justicia norteamericana aseguraron al juez federal Martínez de Giorgi que en el Felton Bank no hay ningún registro de los números de cuentas mencionados, como tampoco clientes con el nombre del diputado nacional ni de la ex ministra, que habían sido denunciados primero por la revista brasileña Veja, y luego por el diario argentino.

“Acá hubo un plan que consistía en esmerilar, desgastar, desprestigiar, acusar a los dirigentes del gobierno anterior, para lo cual todo valía”, señaló Garré sobre lo sucedido, y agregó que “había denunciantes profesionales, algunos políticos que ocupaban tribunas con esto, medios que le daban una gran dimensión, periodistas absolutamente funcionales a esa estrategia, y jueces que después han decretado prisiones preventivas sin causa”.

Para Garré “es toda una conspiración basada en la destrucción de los que formamos parte del gobierno anterior como forma de consolidar el poder que tiene el gobierno actual”.

“Lo vimos con el caso de Miriam Quiroga, la supuesta secretaria del ex presidente Kirchner, donde se inventó que había visto un bolso, después dijo que no lo vio y en la inspección ocular se comprobó que no era posible verlo desde la oficina en la que estaba”, agregó y destacó que “sin embargo lo sostuvo, el periodista Lanata seguramente la retribuyó por ello y ahora finalmente se derrumba”.

La desaparición del ARA San Juan

La diputada nacional indicó que “el gobierno actuó de una manera incomprensible, porque no hubo explicaciones oficiales iniciales, todas eran medias palabras, y sigue sin haberlas” y sostuvo que “todo el proceso fue una cosa desprolija, no seria, que no guarda el respeto debido por los argentinos que queremos saber lo que pasó y quiénes son los responsables, porque merecen las sanciones correspondientes”.

Ayer se cumplieron cuatro meses de la fecha en que se perdió contacto con el submarino ARA San Juan cuando navegaba en el Atlántico Sur con 44 tripulantes a bordo y los familiares realizaron una manifestación en la puerta de la Base Naval de Mar del Plata, para insistir con su reclamo para que el gobierno no detenga la búsqueda.

“El mantenimiento no debe haber sido el correcto porque hay asentados informes de submarinistas que hablan de fallas detectadas que debían ser reparadas, que algunas cosas no funcionaban bien; y evidentemente son instrumentos muy delicados que requieren de un mantenimiento permanente”, consideró la diputada.

Y señaló que “el problema fue una decisión política” porque “el submarino no debería haber navegado hasta ser reparado, ahí se invirtió el orden de las cosas”; en lugar de ordenar que el buque “vaya a  Mar del Plata” para luego ser reparado, debería “haber sido al revés para poner a salvo a los tripulantes”.