Miguel Pichetto, el senador nacional por Río Negro que preside la bancada del PJ-Frente para la Victoria en la Cámara alta, profundizó ayer su posición contraria a Cristina Kirchner al afirmar que si la ex presidenta de la Nación es elegida para ocupar un escaño en la Cámara, deberá conformar “su propio bloque”.

Al hablar durante un ciclo de conferencias del Rotary Club en el hotel Sheraton de la Capital Federal, el legislador -de forma presumiblemente irónica- se refirió a la líder del kirchnerismo como “la señora”. Además, la criticó por integrar un frente electoral diferente sin la estructura legal del Partido Justicialista, y la consideró por fuera de la “vida interna” del justicialismo.

“Así como la señora armó un partido, es esperable que esa fuerza tenga su correlato en la vida parlamentaria con la conformación de un bloque propio, que deberá denominarse Unidad Ciudadana”, dijo Pichetto.

Calificó además como “un error” que la ex jefa del Estado sea candidata a senadora por la provincia de Buenos Aires por fuera del justicialismo, y dijo que si hubiera aceptado competir en la primaria contra Florencio Randazzo, el peronismo “hoy tendría una expectativa de 40 puntos” para la elección de octubre.

Al redoblar sus críticas contra Unidad Ciudadana, el senador calificó a ese frente político como “una fuerza de centroizquierda” que -según sus palabras- “llega al extremo de considerar que es gobierno es la dictadura”.

Sostuvo que “la legitimidad del presidente Macri es indiscutible”, y luego afirmó que “el peronismo y los gobernadores hicieron un aporte importante en las medidas económicas que el gobierno impulsó. Todas las medidas han sido votadas”, reconoció el presidente de la bancada del PJ-Frente para la Victoria, la mayoría de cuyos miembros han actuado en el Senado como aliados del oficialismo.

Santiago Maldonado

En otro momento de su exposición, y de forma similar a como hizo meses atrás para atacar a los inmigrantes con un discurso xenófobo, esta vez Pichetto arremetió contra la comunidad mapuche e incluso defendió al gobierno ante la desaparición de Santiago Maldonado.

Por un lado consideró que el Estado en general y la Gendarmería en particular “están trabajando bien” en torno de ese caso, y agregó que una vez que sea resuelto, se debería debatir “qué hacer con los sectores violentos que tienen ocupación ilegal y reivindicar un Estado dentro del Estado”.

“El argumento de la tierra sagrada, toda esa pavada, no se puede sostener”, dijo el senador nacional al incursionar en un discurso próximo a posiciones de derecha radicalizada.