En el transcurso de su exposición de ayer en el Senado, el jefe de Gabinete, Marcos Peña, aceptó que "hay sectores productivos con más complicaciones que otros, como las pymes", justificó que "sabíamos que la transición económica iba a llevar a una etapa más compleja y compartimos la preocupación" y sostuvo que el mayor desafío del gobierno de Macri para los próximos meses es la reducción del déficit fiscal.

En el momento de preguntas de algunos de los pocos senadores que estaban en el recinto, al promediar el informe apenas eran unos 15 del total de 72 legisladores, Peña tuvo un cruce con el senador del FpV de Formosa Héctor Mayans.

El legislador le planteó que el gobierno nacional discrimina a las provincias que no son del mismo color político de Cambiemos y vaticinó un final similar al de la fallida gestión de Fernando De la Rúa. "La Alianza tuvo la misma estrategia que ustedes pero profundizada y eso terminó en catástrofe; las políticas públicas que están implementando van a empobrecer a la argentinos", le advirtió.

Peña le respondió que “este gobierno no tolerará ningún acto de represión política ni de persecución ideológica” y le dijo que "lamento el tono de amenaza de que vamos a terminar peor que la Alianza, me gustaría que evite esos comentarios".

Peña reclamó "separar la paja del trigo" al advertir que los cierres de empresas y despidos no son todos "por razones macroeconómicas” sino que hay “casos de mala praxis empresarial que no tienen que ver con una responsabilidad en la política económica oficial".

Aseguró también Peña que otro de los "grandes desafíos" que se plantea el gobierno es "la inserción inteligente de Argentina en el mundo", de manera "estable y previsible", por lo que abogó por la "construcción de confianza" hacia nuestro país desde el exterior.

El funcionario renovó sus repetidas promesas de una recuperación económica para este año. "Estamos convencidos de que en 2017 la Argentina va a crecer. Pero la situación económica dañada hará que el crecimiento no se sienta en todos lados igual", manifestó.

También ratificó que se cumplirá la meta inflacionaria del 17 % en el año fijada por el Banco Central.

En otro orden, se refirió a la crisis que vive Venezuela y consideró que "la comunidad internacional debe alzar la voz y debe plantearle al régimen de Nicolás Maduro la necesidad de parar con la violencia en Venezuela y de restablecer el orden democrático".

Señaló que la solución al conflicto "debe surgir de Venezuela" con "la liberación de los presos políticos y el respeto a la independencia de los poderes".

Por último, Peña enfatizó que el gobierno tiene "la obligación de no repetir los fracasos del pasado y argumentó que la gestión del Pro fue "profundamente discriminada" durante ocho años por el gobierno kirchnerista.

Las preguntas de Juan Abal Medina y los senadores fueguinos Julio Catalán Magni y José Ojeda, del bloque del PJ- FPV, sobre la cuestión Malvinas y, en el caso de los patagónicos, acerca de la "reconversión" que se le exige al parque industrial de Tierra del Fuego, sumido en una ola de despidos, fueron respondidas por Peña sin salirse del protocolo argumental del oficialismo y aseguró que no existe "avalancha" de importaciones.

El jefe de Gabinete advirtió que "hay sectores políticos que buscan permanentemente foguear un conflicto diciendo que el gobierno nacional no quiere defender la soberanía" sobre las islas Malvinas y aseguró que quienes busquen fines políticos sobre este tema "van a quedar como mentirosos". "Lo que vale aquí es la palabra del presidente Mauricio Macri y su compromiso con el reclamo de soberanía".

El funcionario agregó que es un tema “muy interesante para estudiar” la posible creación de una comisión bilateral para tratar la cuestión Malvinas con el objetivo de “ir construyendo una hoja de ruta para tener criterios comunes y la mejor estrategia para la recuperación de las islas”.

El cruce no fue sólo con Mayans. Peña también se cruzó con el senador peronista de San Luis, Daniel Pérsico, quien le reprochó los despidos en Radio Nacional por motivos de "persecución política". "Ustedes venían a unir y cerrar la grieta y la están abriendo cada día más", señaló el legislador.

"Es injustificado plantear subrepticiamente o explícitamente como han hecho referentes del Frente para la Victoria en los últimos tiempos que nosotros propiciamos una actitud de confrontación y violencia", expresó Peña.

Y retrucó: "La ex presidenta ni siquiera asistió al traspaso de poder de este país; mayor violencia institucional simbólica que ese desconocimiento de la legitimidad democrática no hay” finalizó

La sesión especial se cerró con las alocuciones de los presidentes de los bloques parlamentarios, tras lo cual Marcos Peña se retiró para emprender el viaje hacia los Estados Unidos junto al presidente de la Nación.