A partir de declaraciones formuladas por el senador nacional Miguel Pichetto, luego de votar en las legislativas el pasado 22 de octubre en su ciudad, Sierra Grande, se ha reactivado el debate por la instalación de una central nuclear, en este caso con un lugar prefijado, que es en cercanías de Sierra Grande.

A pesar de la existencia de la ley 5227, sancionada hace dos meses con las que el gobierno provincial pretendió dar por cerrado el debate en torno a la instalación de un reactor nuclear chino en la provincia, se volvió a hablar insistentemente del tema, volvieron las reuniones de los que se oponen a la Catedral de Viedma, surgen los que están a favor, sobre todo en Sierra Grande donde ha habido manifestaciones callejeras y en el recinto del Concejo Deliberante, ya hay presentaciones judiciales y pronto habrá consulta popular no vinculante.

En contra sigue, por supuesto los integrantes del denominado Movimiento Antinuclear Rionegrino (MAR) y que ayer se reunieron en asamblea, se manifestaron por las calles de Viedma, y siguen recogiendo firmas de quienes no están de acuerdo.

Fabiana Vega, integrante de ese movimiento dijo que "obviamente no estamos de acuerdo con la consulta popular aun cuando no sea vinculante, nos parece un despropósito por parte del intendente Nelson Iribarren, una afrenta a la ley que se consiguió el último 1º de septiembre en la que se prohíbe la instalación de centrales nucleares de potencia en provincia, al margen que se haya dejado fuera de esa prohibición a los Carem 25 del INVAP, a los que también nos oponemos porque no dejan de ser centrales nucleares de potencia", consideró Vega. 

"Es una postura necia por parte del intendente se Sierra Grande y que persiste la intención tanto de su parte como de algunos otros políticos que en teoría deberían representar nuestros intereses. Entendemos que hay intereses económicos de otra índole detrás de eso, no es que hay un interés por el progreso de la región", agregó la activista.

Igualmente confirmó que no recurrirán a la Justicia para frenar la consulta como se especuló en un primer momento. "Al haberle sacado el carácter de vinculante se transforma en una mera encuesta, siempre con la intención de volver a la carga con la planta nuclear, pero como no obliga a la instalación se descarta la acción judicial respecto de esa ordenanza".

El MAR si responderá ante la Justicia con una presentación contra el prohibimus de un vecino de Bariloche,  Antonio Sánchez que le pide a la Justicia que no se implemente la ley que prohíbe las centrales nucleares, por considerar que es inconstitucional por haberse aprobado en una única vuelta y no haberse realizado una consulta popular a la población. 

"En ese caso si nos vamos a presentar como amicus curiae o con alguna otra figura porque nosotros estamos en defensa de esa ley, aunque no sea una ley perfecta es una ley perfectible y vamos a defender la prohibición de la instalación de esa central nuclear china en Río Negro", agregó Vega. 

La activista consideró que la provincia no convocó a una consulta popular a toda la ciudadanía porque conocen que "es mayoritario el rechazo", y aludió a "encuestas del gobierno que no se han difundido que dirían que el 80 por ciento de los rionegrinos se opone al proyecto nuclear".