El viernes pasado publicábamos que todo hacía indicar que en los más altos niveles nacionales se habría decidido intervenir el Pro en la provincia a partir de una serie de irregularidades, recriminaciones y conflictos de intereses que se generó en el seno del partido en Río Negro y ante la imposibilidad de acercar posiciones.

Esta semana tanto el diputado Sergio Wisky como el delegado del gobierno nacional en Río Negro, Juan Martín, confirmaron aquella versión manifestando que la decisión efectivamente ya se había tomado.

Si bien no se abundó en mayores detalles, se ignora hasta el momento el alcance que tendrá tal intervención, aunque desde Buenos Aires se dejó trascender que se impondrán profundos cambios en la precaria estructura partidaria.

Martín ratificó la inminencia de la resolución porque “es necesario ordenar al partido” y visualizó la realización de ir a las PASO con el radicalismo para definir postulaciones.

Esta decisión forma parte de una resolución de las máximas autoridades nacionales donde se resolvió que en las provincias patagónicas no habrá alianzas por fuera del acuerdo con la UCR, en el espacio de Cambiemos.

Incluso fue descartada esta posibilidad en la provincia de Chubut, donde el gobernador Mario Das Neves, tuvo un ofrecimiento de integración de listas concreto con el partido del macrismo.

Agregó Martín que “la intervención del Pro en la provincia deberá trabajar apremiado por los plazos electorales, en tanto el 13 de mayo vence la inscripción de los partidos y el 13 de junio de las alianzas que participarán en las próximas elecciones nacionales de octubre.

Si bien los representantes del gobierno nacional no lo dijeron, es casi seguro que el interventor será Enrique Braun, dirigente chubutense, coordinador general del Pro en la Patagonia y ex interventor de ese partido en Tierra del Fuego, pariente del actual secretario de Comercio de y del jefe de Gabinete, Marcos Peña.

La designación de un extraprovincial pretende garantizar imparcialidad y prescindencia y desalentar algunos proyectos individuales.

Uno de los integrantes de la Asamblea del Pro, el ex PPR Ricardo Vélez acusó ayer a Wisky y a Martín de ser los que pidieron la intervención del partido en la provincia. “Ellos solicitaron dos o tres veces la intervención” en contra de la dirigencia “que estaba trabajando en un marco institucional, nosotros gestamos el Pro en Río Negro”, afirmó.

Indicó que “creímos en la palabra de Mauricio Macri” y se transformó el PPR en Pro, subrayando que “seguimos creyendo en la palabra de Macri, pero nos han defraudado las personas que conforman la mano larga del gobierno nacional que son Wisky y Martín”.

Sostuvo que “es muy llamativo que un partido que pregona una apertura a las ideas, cercene la posibilidad de expresarse si no se responde a la manda de algunas personas que tienen poder político vinculado a Nación”.

Finalmente aseveró que “no hay respeto por las instituciones”, lo que también entra en contradicción con el discurso de Macri.