La reforma de la Constitución de Río Negro aparece y desaparece en la discusión de los políticos de la provincia, y se mezcla inexorablemente con el tema de la re-reelección del gobernador Alberto Weretilneck.

Luego de las opiniones de los legisladores Facundo López y Marta Milesi en los primeros meses del año, fue el diputado nacional Martín Doñate quien desde la oposición volvió con el tema, y como suele suceder, salen las voces a favor y en contra. El senador Miguel Pichetto dijo que siempre fue reformista y que él ya había propuesto la necesidad en su momento.

La semana pasada, incluso, se mencionó la posibilidad de que Weretilneck encabece la lista de convencionales constituyentes en elecciones que podrían realizarse también el año que viene.

El presidente del Partido Justicialista rionegrino, el intendente de General Roca Martín Soria, dijo el jueves luego de reunirse con los legisladores del bloque provincial, que no se había hablado de una postura unificada sobre una eventual reforma de la carta magna. Aclaró que “en todo caso hay otras urgencias en Río Negro”, y consideró que, de hacerlo, sería “el último error político” de Weretilneck.

El presidente del bloque de Juntos Somos Río Negro, Alejandro Palmieri, señaló que “yo soy proclive a que las normas estén lo más actualizadas posible”, al avalar que se abra un proceso de reforma constitucional. “Ha pasado mucha agua bajo el puente desde 1988 (año de la última reforma) en este país y en esta provincia”, fundamentó.

Por otra parte, negó que el gobernador Weretilneck lo tenga en la agenda para asegurarse ser candidato en el 2019, y afirmó que de acuerdo a varios constitucionalistas, el mandatario puede aspirar a un nuevo mandato sin necesidad de esta reforma.

El titular del bloque oficialista en la Legislatura rionegrina señaló que la necesidad de la reforma “es uno de los planteos” que tiene actualidad, ya que “uno lo ha escuchado de actores y dirigentes políticos que no son del oficialismo, como Miguel Pichetto o Martín Doñate, quienes tampoco son de la misma línea en el Frente para la Victoria”.

También expresó que la Constitución provincial es de 1988, es decir que fue reformada seis años antes de la nacional, y que por eso “no hay que tenerle miedo a la discusión para actualizarla”, recordando que varias jurisdicciones aggiornaron su texto en función de la nacional.

Sobre la posibilidad de una nueva reelección del actual gobernador, insistió con que “algunos lo meten dentro de esta cuestión de la reforma, pero para muchos otros, incluso constitucionalistas con los que he hablado”, dicha reforma “no hace falta, ya el artículo de la Constitución interpretativa lo habilitaría por el primer mandato, por la cuestión de Carlos Soria”.

Palmieri aseguró finalmente que Weretilneck no está preocupado por esto, sino “por resolver los problemas cotidianos, del día a día, él tiene otra agenda”.